Por la Madre Teresa de Chalchihuites
CHALCHIHUITES, ZAC.- 25 de octubre. Buenos días les dé Dios, que el Padre Eterno me los llene de bendiciones y los cuide de todo mal, amén.
HOY -AYER– Zacatecas entero despertó, como de costumbre, con el “¡Jesús!” en la boca: “¡cuatro asesinatos más, cuatro zacatecanos -una mujer y tres nombres- menos.
YA NO es novedad que los ríos de sangre siguen corriendo en todo el estado, sin embargo, y de acuerdo con nuestro Señor Obispo, Monseñor Sigifredo Noriega Barceló, hombre santo y probo, “lo más malo que nos podría pasar es ACOSTUMBRARNOS A LA VIOLENCIA”.
Y TIENE toda la razón nuestro Pastor y Guía Espiritual, no debemos acostumbrarnos a vivir en medio de la violencia, por lo que no nos debe importar que el dueño, perdón, el copropietario de Zacatecas (hasta septiembre de 2021, si antes no se va por incumplido, tal como lo prometió y firmó) Don Alejandro Tello Cristerna, haga pataletas y nos tilde de amarillistas por decir la verdad de lo que sucede en nuestro amado Zacatecas.
NO, DON Alejandro, usted será muy represor y todo lo que se le ocurra en sus cinco minutos violentos y sin razón, pero ni usted ni nadie va a impedir que contemos y lloremos a nuestros muertos, no señor, ya lo dijo Cristo Nuestro Señor:
“LA VERDAD os Hará Libres”, o ¿no es cierto Señor Obispo?
Y, REITERO, nos están matando a tod@s y los dueños de Zacatecas ni se inmutan, pero ¿qué sucedería -ni Dios lo quiera- si esa violencia les llegara a sus familiares?, duele preguntarlo, pero, ya, por el amor de Diosito Santo, hagan algo para frenar eso que ahora los ciudadanos llaman “Tello-Violencia”.
ZACATECAS entero recuerda cuando Don Alejandro Tello asegurana, al pedir el voto para gobernador, que la violencia y los asesinatos eran porque la familia Monreal había pactado con el narco, pero que eso se acabaría en cuanto él llegara a la Casa de los Perros, cosa que sucedió, pero ahora resulta que la violencia se ha incrementado en más de cien por ciento.
¿ESTO QUIERE decir que Nuestro Señor Gobernador pactó el doble con el narcotráfico?
DON ALEJANDRO está obligado a decirnos la verdad: ¿Qué está pasando en Zacatecas?
¿QUIENES son los poderosos narcos que están masacrando a Zacatecas, a su gente, con total impunidad?
ÉL, DON Alejandro tiene que saber quienes son, donde habitan y cómo y por que actúan con tanto sadismo, por eso el pueblo -aunque vive en extrema austeridad y aún así paga religiosamente sus impuestos- les paga, y muy bien por cierto, a un procurador General de Justicia, a un Secretario de Seguridad Publica Estatal, a un General del Ejército Nacional, a una Secretaria General de Gobierno -Saludos hermosa Doña Fabiruchis- a un delegado de la Procuraduría General de Justicia, a un delegado de la Secretaría de Gobernación y a cientos de policías y soldados que conforman el equipo de seguridad, cuyo comandante es Nuestro Señor Gobernador, quien por cierto se ha puesto puesto un zíper en la boca -¿o se lo impuso el joven Hector Alvarado?-, para que ya no conteste con barbaridades las preguntas de los reporteros.
¡AY VIRGENCITA de Zapopan! ¡Cuídanos para no caer!
ENTONCES ¿en qué quedamos, nos cumple o se va?, díganos de una vez para entrarle a una elección extraordinaria y que nos gobierne Don Pedro de León o, ya de perdida, Don Luis Medina Lizalde (mi querido Osito de Peluche) o David Monreal, o de plano hacemos una revolución y ponemos de Gobernador a nuestro Señor Obispo?
¿VE, DON Alejandro, las cosas que me hace decir?
AQUÍ EN Chalchihuites se le dice “pachorruda” a la gente lenta, floja, que no hace bien y de buena gana su trabajo, entonces, Don Alejandro, por favor, por su madrecita chula, no sea usted “pachorrudo” y póngase a trabajar.
PERO BUENO, cambiemos de tema:
HASTA ACÁ, en mi Chalchihuites querido, se escuchan las quejas de los dueños de papelerías de la Capital Zacatecana: dicen que están muy enojados que porque el grueso de la papelería que compra Gobierno del Estado y Presidencia Municipal de Zacatecas, se las surte a un señor de nombre Salvador Tello Sánchez, dizque papá de Don Alejandro.
¡VIRGEN DE Guadalupe!
QUE NOMÁS ven como llegan y se van camiones y camionetas cargadas de papel de diferentes tipos y colores a la papelería ubicada en Guerrero 131, rumbo a Ciudad Gobierno, a la Casa de los Perros y otras direcciones oficiales.
PERO YO no lo creo ¿eh? Esas quejas deben de ser de gente envidiosa, que le tiene tirria a Don Chava Tello.
¡AY DIOS mío! ¡Otra vez se me está quemando la leche!
BUENO, LOS dejo, ya mañana, con el favor de Dios, nos volveremos a leer.