Por La Madre Teresa de Chalchihuites
CHALCHIHUITES, ZAC. sábado 18 de noviembre.- Que tengan todas y todos ustedes un feliz domingo, que las balas de los malos no me los vayan a tocar, tampoco a sus seres queridos, son los deseos de su amiga y que Diosito me los cuide y proteja (no se les olvide ir a misa y dejar su limosnita).
PUES ESTOY muy contenta porque el secretario de Finanzas Jorge Miranda Castro, quien se peina, viste y quiere hablar como el presidente Enrique Peña Nieto, dijo que en 2018 el gobierno del estado, o sea Don Alejandro Tello Cristerna y Nuestra Señora Gobernador Doña Cristina Rodríguez de Tello, no van a cobrar nuevos impuestos ni van a adquirir más deuda y sólo le faltó agregar esa cláusula de: “Si no cumplo, ¡me voy!”, jijiji… qué simpático Don Miranda, me cae muuuy bien, pues es otro de los funcionarios que se rebajó 20 por ciento su sueldo, “trabaja diferente” y vive en la “austeridad”, por lo que hasta los franciscanos lo ven con respeto y admiración.
PUES LA crisis económica por la que atraviesa nuestro máxima casa de estudios, no sólo es permanente sino que día con día se incrementa. Y cómo no, si rectores van y rectores vienen y salen con las alforjas llenas de oro y plata, además de que heredan decenas y decenas de gente que recibe sus quincenas sin trabajar, sí me refiero a esos que llaman “aviadores”.
ME DICEN, y nadie lo duda, que la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) es un barril sin fondo, por lo que alguien debe de hacer una depuración y sacar de ahí a tanto zángano que está chupando diariamente el presupuesto.
TENEMOS una universidad con maestros muy preparados que ya quisiera la Autónoma de México y hacen falta más de esos maestros que ven su profesión como apostolado, pero el enjambre de zánganos no lo permite.
NADIE ignora que para salir de la pobreza existen dos fórmulas: alimentación y educación, pues entonces a darle por ahí y deshacerse de ese enjambre de vividores que tiene años cobrando sin trabajar, además de cuidarle las manos al rector en turno.
Y BIEN harían los maestros jubilados, que tienen una vida desahogada, dejar de cobrar su pensión, para que ese dinero, que deben de ser millones y millones de pesos, sirva para educar a cientos de zacatecanas y zacatecanos más.
POR EJEMPLO: ¿creen ustedes que el padre de Nuestro Señor Gobernador, Don Alejandro Tello Cristerna, que tanto nos exige vivir en “austeridad” (hacer más con menos) y “trabajar diferente”, tenga necesidad de seguir cobrando su pensión de la UAZ?
YO, LA verdad, no lo creo y más cuándo de él sólo depende su adorada esposa Doña Lourdes Cristerna Maldonado, piadosa y hermosa Dama católica.
NO, DON Salvador Tello Sánchez, padre de Nuestro Señor Gobernador, que de seguro vive sin preocupación alguna de las ganancias que le deja su papelería “Casa Tello”, bien puede dejar de cobrar su pensión sin problema alguno, más ahora que es el proveedor favorito de Gobierno del Estado.
SÍ, NUESTRA máxima casa de estudios tiene salvación, pero tendrá que sacudirse a toda esa bola de zánganos que cobran sin trabajar, obligar a todos aquellos ex rectores que le metieron las manos al cajón a que regresen los millones de pesos que saquearon y a esos maestros jubilados, que viven bien, sin sobresaltos, a que dejen de cobrar su pensión en beneficio de la patria, de esos jóvenes que en algunos años más van a dirigir el destino de Zacatecas y nuestro país.
¡AY QUÉ pena! Estoy escribiendo y hablando en voz alta y mis hermanas, sobre todo Fabiola, Sor Alegría, aplauden y gritan: “¡La Madre Teresa para Gobernadora de Zacatecas!”.
PERO LO digo en serio, aunque sé que mi Góber Precioso se va a molestar: ¿A poco don Chava Tello, señor de todos mis respetos, necesita de su pensión de la UAZ para vivir?
CÓMO ME gustaría que Nuestro Amado Señor Gobernador le dijera a Don Chava:
“APÁ, agarre la onda, ‘trabaje diferente’, sea usted un comerciante ‘austero’ y done su pensión de la UAZ a la UAZ para que tengamos más chavos estudiando, hágame caso apá”.
PUES ahí están esas dos recetas que esta humilde monja propone, pero además yo estoy dispuesta a donar a la UAZ cinco botellas de rompope cada quincena para que las ponga en venta y así colaborar con mi granito de arena en pro de la educación laica y gratuita de mis hermanas y hermanos de Zacatecas y la región.
PASANDO a otro tema: ¿por qué los fines de semana no trabaja Don Alejandro? ¿No acaso cuando andaba pidiendo nuestro voto, nos prometió trabajaría las 24 horas del día todos los días de la semana? ¿Por qué mi Góber Precioso practica tanto la mentira?
¿ACASO NO sabe que la mentira es pecando?, es el octavo mandamiento de la ley de Dios.
EN FIN, tenemos un Gobernador mentiroso y de Semana Inglesa.
A PROPÓSITO de las mentiras de Don Señor Gobernador, le transcribiré a todas y todos ustedes lo que él firmó cuando andaba en campaña para gobernador de Zacatecas:
CONTRATO CON LAS FAMILIAS Y SUS VALORES:
1.- PREDICAR CON EL EJEMPLO.
2.- VALOR Y PRESTIGIO A LA POLÍTICA.
3- FOMENTO A LOS VALORES UNIVERSALES, A TRAVÉS DE EDUCACIÓN Y CULTURA DE LA PAZ QUE PREVENGAN LA INSEGURIDAD Y EL CRIMEN.
4.- CONVIVENCIA SOCIAL PARA EL PROGRESO DE NUESTRAS COMUNIDADES.
5.- PROMOVER LA EVOLUCIÓN DE LAS CONCIENCIAS A TRAVÉS DE UNA NUEVA CULTURA SOLIDARIA.
6.- VALORES COMO EJE RECTOR DEL INDIVIDUO.
7.- FOMENTAR VALORES EN LAS FAMILIAS DE ZACATECAS.
8.- VELAR POR LOS INTERESES DE LOS NIÑOS, JÓVENES, MUJERES Y CIUDADANÍA EN GENERAL.
9.- DIÁLOGO FRANCO Y RESPETUOSO, COMO INSTRUMENTO NATURAL DE LA DEMOCRACIA PARA TRABAJAR POR ZACATECAS.
10.- AMPLIAR LA PARTICIPACIÓN ACTIVA DE LA SOCIEDAD EN LA CRUZADA NACIONAL DE VALORES.
*****
PUES AQUÍ tienen ustedes otro de los contratos que Don Alejandro firmó, agregando al margen:
“…UN CONTRATO vincula, obliga y tiene consecuencia. Garantiza que mi gobierno tendrá la obligación de solucionar los problemas que más te preocupan. Mediante esta acción que les propongo con toda responsabilidad restableceremos los lazos de confianza entre los ciudadanos y el gobierno. El contrato con Zacatecas contiene una importante cláusula: Si no cumplo, ¡me voy!”.
P.D.
HOY SÁBADO 18 de noviembre se cumplen 24 días de la “desaparición” de los funcionarios del Gobierno del Estado, Rosalía Ramírez Quireza y Antonio Troncoso Escareña.
SUS SUPERIORES los enviaron en una camioneta a Luis Moya, Loreto y Pinos, Zacatecas (a liquidar la gasolina de las patrullas que vigilan esos tres municipios), considerados de los más peligrosos del estado, sin escolta alguna.
APARECIÓ la camioneta, pero no Rosalía y Antonio. Mañana (hoy) domingo, decenas de personas nuevamente marcharán por algunas calles de la capital del estado, se plantarán en Plaza de Armas y, a las puertas de Palacio de Gobierno (la Casa de los Perros), exigirán a gritos:
“¡VIVOS LOS mandaron a cumplir con su trabajo, vivos nos los tienen que regresar!”, desgraciadamente nadie, ni sus propios compañeros de trabajo, ni los diputados, ni la Universidad, ni la iniciativa privada, ni los partidos políticos oficiales ni los de oposición, nada, nadie, se han “atrevido” a apoyarlos.
VIVIMOS EN un estado en el que todos tenemos miedo: “Diles que no me maten”, volvería escribir Juan Rulfo.
