Por Alain Luévano Díaz

Felipe González, Carlos Lozano, Felipe de Jesús Muñoz: los titiriteros

Felipe González, Carlos Lozano, Felipe de Jesús Muñoz: los titiriteros

¿CUÁL ES el fondo del asunto de la brutal embestida contra Tribuna Libre y Página 24, al sacarnos con hombres armados de nuestras instalaciones y sellarlas? Quienes pretenden minimizar u ocultar este atentado en contra de las libertades de expresión y de prensa, similar al que se cometían en los tiempos del dictador Porfirio Díaz, dicen inmediatamente: “es un pleito entre particulares”.

UNA VEZ más recurren a la mentira sin ningún pudor. El objetivo no es solamente apropiarse del cabezal o marca de Tribuna Libre, pues el de Página 24 ya fue recuperado totalmente por su fundador y dueño, mi padre Ramiro Luévano López. La meta, clara e innegable, es asesinar a una voz crítica e independiente por venganzas políticas. Como lo escribió alguna vez Rodolfo Franco Ramírez: “Ramiro Luévano llorará lágrimas de sangre”.

RECURRIENDO A la definición acuñada por Andrés Manuel López Obrador, quienes ordenaron el ataque son miembros de la mafia del poder, que si bien ya no ocupan cargos públicos, estos personajes que se han enriquecido a costa del pueblo aún mantienen sus privilegios y cuentan con cómplices enquistados en el Gobierno Federal.

LOS AUTORES de la acometida no son Rodolfo Franco ni María del Refugio Martínez Guardado, ellos son simplemente unos peleles de los verdaderos responsables: el ex gobernador, ex subsecretario de Gobernación de Vicente Fox y ex senador Felipe González González; el ex senador y ex gobernador Carlos Lozano de la Torre, y el ex procurador de Justicia de Aguascalientes y Colima y ex subprocurador Especializado en Investigación de Delitos Federales de la FGR, Felipe de Jesús Muñoz Vázquez.

ELLOS UTILIZAN a Rodolfo Franco y María del Refugio Martínez, quienes se disfrazan de periodistas pero sus rosarios de delitos los exhiben como lo que son, unos delincuentes, para tomar represalias por las denuncias puntuales que en Tribuna Libre y Página 24 se han realizado sobre los actos corruptos y crímenes cometidos por Felipe González, Carlos Lozano y Felipe Muñoz.

El Aseguramiento, una Maniobra más

EL CIERRE de las instalaciones de Tribuna Libre y Página 24 no es un hecho aislado para intentar acabar con la empresa periodística de Ramiro Luévano López, sino que es uno más en una lista larga. Mencionaré los más importantes: los lectores deben recordar que el ex mandatario Felipe se manchó las manos de sangre inocente y que demandó por 13 millones 500 mil pesos a periodistas de Tribuna Libre y Página 24, incluyendo a su director, por “daño moral”, entre otros intentos.

FELIPE DE Jesús, obviamente con el espaldarazo del entonces gobernador Carlos, torció la ley para encarcelar a nuestros compañeros Carlos Alberto Limón Díaz de León y Esteban Bonilla López, acusándolos falsamente de “delincuencia organizada” y logró que fueran encarcelados en penales de máxima seguridad y amenazó con hacer lo mismo con Ramiro Luévano López.

AHORA, CUAL titiriteros, Felipe, Carlos y Felipe de Jesús siguen manejando a los peligrosos ladrones para desaparecer a Tribuna Libre y Página 24, quienes han encontrado otro aliado para despotricar contra nosotros: José Luis “La Víbora” Morales, a quien el ex gobernador Otto Granados Roldán lo define como “locutor canalla, chantajista, mentiroso, despreciable, mediocre, desequilibrado psicológico, sinvergüenza”, etcétera.

Termápolis Noticias: Daño Colateral

EL PASADO miércoles escribí el artículo “¡No nos Callarán!” para denunciar el atentado contra nuestra casa editorial, y comencé a difundirlo por Whatsapp. A los pocos minutos, dos periodistas, Francisco Elizondo Viramontes, de Radio Zacatecas y Alberto Viveros Lozano, de Termápolis Noticias, me ofrecieron sus espacios para que el jueves por la mañana expresara ante su público, en directo y sin ambages, la verdad del asunto: los responsables del aseguramiento de las oficinas y talleres de Tribuna Libre y Página 24 son Felipe González González, Carlos Lozano de la Torre y Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, utilizando a los pillos Rodolfo Franco Ramírez y María de Jesús Martínez Guardado.

ALREDEDOR DE las 10 de la mañana de ese mismo jueves, Termápolis Noticias colocó en su portal de Facebook el segmento en que participé y a los pocos minutos ya contaba con cientos de reproducciones. Cuando lo compartí en mi cuenta personal, la página de Termápolis Noticias en dicha red social fue eliminada por hackers y hasta este domingo no han podido restaurarla, lo que causa perjuicio mayúsculo a su propietario, Alberto Viveros, pues de un plumazo borraron todos sus programas, textos, fotografías y videos que había publicado desde el año 2016 así como todos los anuncios de sus patrocinadores, “likes” y comentarios de sus seguidores. Es decir, por darle voz a Tribuna Libre y Página 24, también lo intentaron acallar y afectaron su trabajo, empleados e intereses.

NO ES UNA casualidad, desde luego. A Felipe, Carlos y Felipe de Jesús no les importa perjudicar a otro medio de comunicación para que la sociedad de Aguascalientes no se entere de su criminal empeño por destruir a toda costa a Ramiro Luévano López y sus periódicos.

ESTO DEMUESTRA que el multicitado trío y sus “caporegimes” desprecian a la democracia, pues son auténticos enemigos de la prensa y la libre discusión de las ideas. Ejemplo claro es que recurren a triquiñuelas, amenazas, extorsiones, hackers, leguleyos, merolicos radiofónicos y tundeteclas a sueldo, para aparentar que la agresión a Tribuna Libre y Página 24 es un “pleito entre particulares” y nada más.

NO SE EQUIVOQUEN. Esta es una lucha por las libertades de expresión y de prensa, lo que es de la incumbencia de todos y no de “particulares”. Al igual que cualquier ciudadano o periodista, quienes conformamos Tribuna Libre y Página 24 tenemos derecho a existir, tenemos derecho a trabajar, tenemos derecho a expresarnos y tenemos derecho de informar a la sociedad y, en el fondo, eso es lo que quieren arrebatarnos los pillos y sus jefes mafiosos a quienes les estorbamos para seguir haciendo sus negocios inmorales e ilegales y corruptelas al amparo de la impunidad.