“Pobre Gente, les Quitan su Ganado y le Cobran Moche”
Por Manuel Caldera
Sigifredo Noriega Barceló (Foto: Rocío Castro Alvarado)
En conferencia de prensa el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, mandó un mensaje con motivo de “Domingo de Resurrección”, además de que es uno de los días que da el sentido a todos los domingos, así como a la fe, fiesta y esperanza, así como de la misión de la iglesia ante la reunión de las creencias de las familias.
“Alimenta la esperanza y le da el sentido a la misión, por eso es importante el domingo para la reunión con la eucaristía, además es familiar, por lo que tenemos que prestar atención para que esto no se pierda o se diluya, ya que la cultura urbana no facilita la reunión familiar y la cultura del trabajo. Por eso el mensaje, del Domingo de Pascua, es para vivir y alimentar la vida de cada día”.
“Es la motivación el motor principal para la vida cristiana, por eso el llamado es que esto influya en la vida, realmente el saludo de paz en la celebración es para que la vivamos en la convivencia diaria, en el trabajo, la familia y la calle”.
Además, sobre el llamado a recuperar la paz y la seguridad, por parte del episcopado mexicano, el obispo de Zacatecas destacó que en efecto hay problemas diversos en todo el país, sobre todo por los graves casos en que el crimen controla territorios enteros sin que la autoridad hagan algo para revertir o solucionar, tanto desde lo municipal, estatal o federal.
“Es una realidad que está ahí y no se puede negar, que hay economía criminal y también hay poder, porque en algunas partes la delincuencia es la que gobierna o ha tomado posesión, entonces esperemos que esto vaya disminuyendo. Es importante que haya políticas públicas que traten de recuperar terreno de la paz y de una paz que ayude a una vida estable. Por ejemplo la economía, pobres personas que les quitan su ganado, pagan moche por la cabeza de ganado que venden, no digamos también los comercios”.
“Esperemos que esto ayude a tomar conciencia y que todos asumamos la responsabilidad que tenemos. Un cambio siempre tiene una intención y fin, por eso creo que es para mejorar y esperamos que haya frutos, a diferencia de resultados tangibles, pero los frutos es esa paz que va quedando, esa satisfacción interior de la misión cumplida”.