Uno de los Héroes Revolucionarios más Importantes: Jesús Vargas
Por Nallely de León Montellano
Este viernes, en el museo de arte abstracto Manuel Felguérez, se llevó a cabo la conmemoración del aniversario luctuoso de Pancho Villa, el cual fue denominado “Villa vive, la patria sigue” (Foto: Cortesía)
Este viernes, en el museo de arte abstracto Manuel Felguérez, se llevó a cabo la conmemoración del aniversario luctuoso de Pancho Villa, el cual fue denominado “Villa vive, la patria sigue”.
Para ello participaron los escritores Paco Ignacio Taibo II, Jesús Vargas y Pedro Salmerón, quienes ofrecieron un conversatorio plasmado en la historia característica de la lucha de este personaje revolucionario.
En voz de Paco Ignacio Taibo II, se ofreció a los asistentes una semblanza que tiene qué ver con su experiencia como escritor con dicho personaje, el cual, dijo, se ha interpretado con una sonrisa y lo que implica el villismo, y por otro lado, con absoluto desconocimiento.
Por su parte Jesús Vargas, dijo que la Figura de Villa lo ha vinculado con la personalidad de su abuelo, quien murió cuando apenas tenía seis años, sin embargo, relató que, no fue hasta 1990 que a través de la escritora Nelly Campobello pudo comenzar a conocer a Francisco Villa y la llamada Religión Villista.
Zacatecas fue el momento culmen de la División del Norte, pues fue aquí donde se resolvió el término de la dictadura de Victoriano Huerta determinada por Villa, así como la caída de la dictadura de Porfirio Díaz, entre otros momentos de gloria, explicó Vargas.
También recordó que Villa, nacido en los estratos sociales más bajos de México, vivió como hijo de un peón, y por muchos años fue prófugo de la justicia, para, finalmente, convertirse en uno de los héroes revolucionarios más importantes de la historia.
A manera de reflexión, el también escritor Pedro Salmón, llamó a comenzar a ver el tema de la Batalla de Zacatecas como la posible mejor victoria de la División del Norte donde se logró vencer a un gobierno dictador, y donde Villa junto con la División del Norte únicamente necesitaron de cuatro horas para derrotar la dictadura de Victoriano Huerta.