“Son a los que el Crimen Organizado Coopta”

Por Rubén Palomo Macías

Fotografía relevante a la nota.

Jaime Ramos Martínez (Foto: Diana Moreno Valtierra)

Jaime Ramos Martínez, activista so­cial, dijo a Página 24 Zacatecas que se debe poner especial atención en las nuevas generaciones del estado zacate­cano para que no sean cooptados por el crimen organizado, sin dejar de lado la responsabilidad que tienen los padres de familia, y que los menores puedan ver la diferencia entre lograr tener una carrera universitaria y el camino fácil que existe en el mundo de la droga y el crimen organizado.

“Es importante que resaltemos eso, seguimos señalando que continúan sucediendo hechos violentos y diver­sas situaciones y para terminar eso aún falta tiempo. Esa desactivación y desmotivación de la delincuencia debe servir para buscar la diferencia entre estar llorando a una fotografía y estar reconociendo un título colgado en la pared”, aseveró.

El activista social señaló que faltan programas destinados a la juventud, aunque existe el esfuerzo de las becas Benito Juárez, el programa Jóvenes Construyendo el Futuro y eso viene a ayudar, sin embargo faltan programas para que la gente pierda el interés en la vida fácil del crimen organizado.

“Yo le doy permiso a mi hija de salir a los antros pero yo la llevo y la regreso a casa, uno toma medidas dependiendo del contexto social que existe, depen­diendo de las actividades y desarrollo de las nuevas juventudes. Creo que como sociedad también tenemos mucho que revisar y atender pero también tene­mos que reconocer que fallamos como sociedad siendo comodinos con activi­dades que no se hacían antes”, agregó.

Jaime Ramos solicitó a las institu­ciones que se revise el presupuesto que se solicita y se haga uso de dicho presupuesto a conciencia para que los programas funciones de la mejor manera.

“Es todo lo que se requiere para des­activar una nueva normalidad enfocada al crimen, que los jóvenes y la gente cada vez más sientan mayores y mejores percepciones de seguridad. Está demos­trado que la mayor parte de jóvenes que han sido levantados y secuestrados no están dedicados al estudio, que se les ha hecho fácil la vida del crimen y las instituciones no les han dado alterna­tivas para salir de esa alternativa de la llamada vida fácil”, finalizó.