En su Obra Fotográfica

Por Nallely de León Montellano

Fotografía relevante a la nota.

José Baltazar Chaurregui, locatario del Centro Histórico (Foto: Diana Moreno Valtierra)

Huellas Invisibles, Memorias de Búsqueda, es una obra fotográfica de la autoría de Diana Valdez Hernández que retrata la lucha incansable de madres y familias que día con día buscan a sus seres queridos y que, en un grito desesperado buscan a su vez que sus seres queridos no se queden como un número más en la estadística de personas desaparecidas en Zacatecas y en México.

Son 27 piezas que relatan el activismo de cuatro familias que día con día despiertan con la esperanza de saber el paradero de sus familiares desaparecidos, y el desasosiego de volver a la cama sin noticias esperanzadoras, es lo que estará plasmado en la sala II del Museo Zacatecano, a partir de este sábado 28 de octubre.

Valdez Hernández explicó que las cuatro historias de su obra relata el reciente caso de los jornaleros desaparecidos en Estancia de Ánimas por elementos de la policía, el segundo caso habla sobre la desaparición del hijo de Elvia Reyes en Loreto, Zacatecas, La desaparición del esposo de la señora Elvia Carmona y la desaparición del joven Luis Jovani, desde enero de este año.

En dicha exposición se podrán observar las historias compartidas por las familias buscadoras constan de cartas escritas para sus seres queridos desaparecidos, la realización de ositos con prendas de las víctimas, y los tejidos con rafia que domingo a domingo realizan en memoria de todas aquellas personas que no han regresado a casa, así como un video que relata las cuatro historias antes mencionadas.

Desde hace un año, la fotógrafa autora comenzó a acercarse a los colectivos de familias buscadoras con la finalidad de, respetuosamente, sumarse a la lucha diaria a través de sus fotografías, documentando su realidad y su dolor para hacerlos visibles y escuchados.

“Cuando tuve la oportunidad de convivir con los colectivos me surgió la necesidad de hacer algo con mis herramientas para contribuir con su búsqueda”, mencionó.

El colectivo Sangre de mi Sangre cuyos integrantes realizan una actividad de tejido en memoria de las más de 100 mil personas desaparecidas en México, fue el primer acercamiento de Diana para comenzar con su trabajo documental; respetuosamente les habló de su proyecto como fotógrafa y fue en ese momento que se convirtió en parte fundamental de este activismo.

“Desde chiquita tuve un interés muy grande por el documental y la lucha social, y eso es lo que me ha hecho interesarme por el tema, además de una situación familiar que viví hace ya varios años”, agregó la fotógrafa.

Diana Valdez agradeció la presencia de las madres buscadoras que la acompañaron en su proceso creativo, así como a las instituciones que hicieron posible la instalación de su exposición, reiteró que se asume como una luchadora social de la lente, y continuará sensibilizando a la sociedad a través de imágenes que si bien son crudas, son exactamente la realidad de Zacatecas.