Importante, Preservar Nuestras Tradiciones: Josefina Nava
Por Nallely de León Montellano
En conferencia de prensa, Josefina Nava, presidenta de Apazac detalló que la principal intención de dicho festival es dar a conocer de manera detallada las tradiciones que guarda la capital de Zacatecas para los visitantes foráneos y locales (Foto: Rocío Castro Alvarado)
El próximo 28 de marzo se llevará a cabo El Festival del Pulque y la Melcocha en su edición 2024, con un recorrido por el barrio Mexicapan de la capital y posteriormente una verbena de venta de alimentos típicos.
En conferencia de prensa, Josefina Nava, presidenta de Apazac detalló que la principal intención de dicho festival es dar a conocer de manera detallada las tradiciones que guarda la capital de Zacatecas para los visitantes foráneos y locales.
Explicó que para ello se creará una melcocha gigante de 5 metros de diámetro con la cual arrancará el recorrido denominado Dulce Caminar y la actividad será complementada con actividades de danza típicas de Mexicapan y la mencionada verbena popular.
Expresó que “para mí, parte de la festividad que nosotros hemos rescatados no es nueva, yo crecí ahí en la Plazuela de García, en la calle de Jesús y en Mexicapan, y siempre en Semana Santa está lleno de melcochas, de enchiladas y nos dimos cuenta que algunos de nuestros hijos ya no conocen nuestras costumbres”.
En este sentido, Nava señaló la importancia de continuar inculcando las costumbres y tradiciones de las festividades de Semana Santa a las nuevas generaciones con la finalidad de que éstas se preserven.
“Es importante que sepamos que las enchiladas no se inventaron hace tres años, o que la melcocha no es un dulce que se hace en unas súper fábricas, sino que es un dulce que data del periodo novohispano y que él pulque es una bebida que data del periodo prehispánico”, argumentó.
Finalmente, invitó a la ciudadanía en general a apreciar el recorrido de la melcocha gigante así como asistir a degustar los alimentos que se ofrecerán en la verbena popular y promover la preservación de las actividades religiosas de la ciudad.