Crónica de Día de Muertos:
Por Nallely de León Montellano
Familiares, con entusiasmo, limpian y adornan la última morada de sus seres queridos, a quienes les llevaron música, alimentos y bebidas que en vida fueron de su preferencia
Este 2 de noviembre los panteones de Zacatecas se vistieron de flores amarillas naranja y blancas que decoraron las tumbas de quienes descansan en la eternidad.
Desde las primeras horas de este sábado 2 de noviembre comenzaron a registrarse las primeras visitas de quienes, con entusiasmo limpian y adornan la última morada de sus seres queridos, a quienes también, en algunos casos, les llevaron música, prepararon alimentos y bebidas que en vida fueron de su preferencia.
En los andadores de los panteones se escuchaban murmullos y pláticas con las que recordaban las vivencias de sus seres queridos mientras limpiaban y adornaban las criptas. Además, rezos y cantos para pedir por el eterno descanso de quienes descansan en el camposanto.
Doña Catalina Hernández Rocha, platicó a Página 24 Zacatecas que año con año acude a la tumba de su hijo, quien partió de este mundo hace ocho años; mencionó que le gusta adornar su lápida con los colores rojo y azul, favoritos de su hijo, además de reproducir una de sus canciones favoritas, mientras le cuenta cómo es la vida desde que él se fue.
Integrantes de la familia Ochoa, comentaron que año con año se reúnen para visitar la tumba de los abuelos, donde preparan carne asada y contratan músicos de la región para recordar, honrar y venerar su recuerdo además de orar en familia por el descanso eterno de sus almas.
A pesar del dolor de muchas familias, el 2 de noviembre es una fiesta de música y recuerdos, aunque se respira melancolía y añoranza por el deseo de volver a verlos y abrazarlos.
Además, el recuerdo de los fieles difuntos y las tradiciones de este día son un motivo para unir a las familias, para reflexionar y convivir con quienes aún son parte de este mundo.