Zacatecas Nunca Contó con un Consejo de la Judicatura: Medina

Por Miguel Alvarado Valle

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El exdiputado federal y local, José Luis Medina Lizalde “El Oso” (Foto: Rocío Castro Alvarado)

El exdiputado federal y local, José Luis Medina Lizalde “El Oso”, calificó como positiva la reciente reforma al Poder Judicial en Zacatecas, resaltando que se trata de un proceso de armonización con la Constitución General de la República.

Según José Luis Medina, esta reforma es un mandato constitucional que los estados debían cumplir antes del 14 de marzo de 2025, y Zacatecas ha dado un paso oportuno en esta dirección para fortalecer el marco normativo de cara a las elecciones del presente año.

Aunque desconoce si esta armonización fue resultado de un diálogo entre el Poder Judicial y el Ejecutivo estatal o si se trató únicamente de una iniciativa elaborada por redactores del gobierno, considera que era una acción ineludible.

En cuanto al impacto de la reforma, Medina Lizalde destacó que se creará un Tribunal de Disciplina Judicial como una medida fundamental para combatir la corrupción dentro del sistema judicial.

Afirmó que, si bien la posibilidad de actos indebidos como el nepotismo o corrupción que existen en cualquier sistema, la clave radica en la implementación de mecanismos efectivos para prevenir y sancionar estas prácticas.

Recordó que Zacatecas nunca contó con un Consejo de la Judicatura, una instancia que, aunque fue simbólica a nivel nacional, al menos ofrecía una estructura para enfrentar dichos problemas.

El exlegislador también señaló que el Poder Judicial de Zacatecas se distingue por no reproducir los vicios graves que han caracterizado al ámbito federal, como el privilegio extremo o la toma de decisiones que sabotearon gobiernos surgidos del voto popular.

Medina Lizalde expresó confianza en la calidad del Poder Judicial de Zacatecas, destacando que sus jueces han demostrado una trayectoria favorable en comparación con algunos juzgadores federales, quienes han sido cuestionados por sentencias favorables a intereses económicos poderosos o figuras del crimen organizado.

Aunque reconoció que pueden existir excepciones dentro del sistema estatal, aseguró que la percepción general es positiva y que los jueces locales no enfrentan las mismas manchas que han empañado a algunos de sus pares a nivel federal.