No Vamos a Parar Hasta Frenar su Construcción: García Zamora
Por Nallely de León Montellano
Tras el accidente registrado el pasado 3 de marzo en la obra del viaducto elevado, donde un trabajador cayó a un hoyo de más de 20 metros de profundidad, la ciudadanía ha mostrado su respaldo a las organizaciones que están en contra de dicha obra, además de manifestar su repudio al gobierno estatal (Foto: Rocío Castro Alvarado)
Tras el accidente registrado el pasado 3 de marzo en la obra del viaducto elevado, donde un trabajador cayó a un hoyo de más de 20 metros de profundidad, la ciudadanía ha mostrado su respaldo a las organizaciones que están en contra de dicha obra, además de manifestar su repudio al gobierno estatal.
Así lo dieron a conocer integrantes de la organización Ciudadanía Participativa quienes sostienen la importancia de que el proyecto se detenga de manera definitiva, dado que, según sus declaraciones, esta obra no aporta nada bueno para el progreso del estado.
“Nuestro llamamiento el día de hoy, es para insistir en que nos asiste la razón, aunque en este momento no hayamos obtenido la suspensión como resultado de nuestros reclamos en los tribunales federales”.
Respecto a lo anterior, agregaron que no tienen una negativa por parte de las autoridades judiciales, no obstante, “tenemos observaciones puntuales, críticas hacia la manera en que se han conducido los juzgadores que han tenido conocimiento de nuestros casos hasta el momento”.
Advirtieron que continuarán insistiendo en la cancelación de la obra a través de las instancias legales y subrayaron que, si es necesario acudir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, buscarán el camino preciso para lograrlo. Rodolfo García Zamora reiteró que, el renombrado viaducto de la muerte “se sustenta en la ilegalidad reiterada durante 3 años 7 meses y esta ilegalidad la hemos corroborado a través de los tres amparos que hemos metido al Poder judicial”.
Precisó que, entre los riesgos está el gasoducto que corre por el bulevar, así como los diferentes cables de alta tensión donde se desconoce si hay una propuesta para trabajar sin peligro y por último señaló los problemas de la mecánica de suelos y la gran cantidad de toneladas de mercurio que están en el subsuelo y que al momento de remover la tierra se convertirá en un foco de infección para la población.
Para finalizar, señalaron que la autorización para realizar trabajos preliminares con los cuales tenían que reparar el drenaje subterráneo, no es equivalente a los permisos para el comienzo formal de la obra, lo cual ya están haciendo desde hace días atrás.