“Hasta 30 Servicios más”
Por Miguel Alvarado Valle

Oswaldo Caldera Murillo, Director de la Policía de Seguridad Vial (Fotos: Rocio Castro Alvarado)
La atención al tránsito en Zacatecas ha incrementado de manera significativa, en gran parte debido a las obras del segundo piso en el bulevar metropolitano, así lo informó Oswaldo Caldera Murillo, Director de la Policía de Seguridad Vial.
Indicó que este proyecto ha generado una sobrecarga de trabajo para los elementos, quienes ahora enfrentan hasta 30 servicios adicionales diarios solo en esa zona, sumando a las tareas ordinarias, de vigilancia en eventos especiales y la atención a quejas ciudadanas.
“Quisiéramos tener más elementos para cubrir más, pero traemos gente de afuera. Todos los elementos que ustedes ven que están sobre el bulevar, no son elementos que están adscritos a la capital sino que son de municipios que nos los jalamos para reforzar los servicios extras que tenemos ahorita”.
Enfátizo que el panorama actual exige una mayor coordinación operativa y, sobre todo, una ciudadanía más consciente del impacto de sus acciones en la vía pública.
En este sentido, mencionó que la falta de cultura vial y la baja tolerancia a las infracciones son factores que agravan este escenario, ya que cada vez es más común que ciudadanos respondan con molestia ante un llamado de atención o una sanción, incluso cuando su falta es evidente.
Señaló que las reacciones van desde negat ivas verbales hasta agresiones físicas, como ha ocurrido en algunos casos recientes, además resaltó en lo que va del año, se han registrado al menos tres agresiones a personal de tránsito.
Por otro lado, apuntó que uno de los focos de conflicto más persistentes es el uso indebido de cajones de estacionamiento destinados a personas con discapacidad, una infracción que implica una sanción mínima de 120 UMAS.
Aunque existe cier ta conciencia sobre la importancia de respetar estos espacios, aún hay quienes minimizan la falta argumentando que “solo fueron unos minutos”, por lo que esta actitud no solo representa una falta de empatía, sino que pone en riesgo a los oficiales, como ocurrió con una agente agredida mientras l lamaba la atención a una persona mal estacionada en el Centro Histórico.
“Sí hay cultura vial. Mientras el ciudadano entienda su parte y el elemento haga la suya, las cosas fluyen; pero cuando uno falla, es cuando se complica todo”, concluyó Caldera.