“La Siglo XXI es un Peligro Constante”
Por Nallely de León Montellano

Estudiantes y familias de la Preparatoria Carlos Marx bloquearon este martes la vialidad Siglo XXI para denunciar el peligro constante que enfrentan al cruzar la zona
La exigencia por condiciones básicas de seguridad vial volvió a hacerse visible en Guadalupe, donde estudiantes y familias de la Preparatoria Carlos Marx bloquearon este martes la vialidad Siglo XXI para denunciar el peligro constante que enfrentan al cruzar la zona. La protesta ocurrió a unos metros del puente de Martínez Domínguez, punto donde recientemente una alumna de dicha preparatoria perdió la vida tras ser atropellada, hecho que detonó el reclamo colectivo.
Desde temprano, jóvenes y padres de familia colocaron carteles y cerraron el tránsito vehicular como una forma de presionar a las autoridades para que atiendan la falta de infraestructura. Señalaron que la ausencia de un cruce seguro y la velocidad excesiva de los automóviles convierten el trayecto diario a la preparatoria en un riesgo permanente.
Por ello, exigieron la construcción de un puente peatonal y la colocación de reductores que obliguen a disminuir la marcha vehicular. Durante la manifestación se escucharon mensajes que apelaban al derecho a estudiar sin poner en juego la vida. Las y los participantes subrayaron que su objetivo es prevenir nuevas tragedias y que la responsabilidad recae en los gobiernos municipal y estatal, quienes deben garantizar un entorno seguro para la comunidad escolar.
Tras varias horas de bloqueo, representantes del ayuntamiento de Guadalupe y de la Policía Vial acudieron al lugar y se comprometieron a limpiar la maleza que obstruye la visibilidad, mantener vigilancia durante los horarios de entrada y salida, así como colocar reductores de velocidad mientras se define una solución de mayor alcance.
Con estos acuerdos, las y los manifestantes liberaron la circulación.
Sin embargo, advirtieron que volverán a tomar la vialidad si los compromisos no se cumplen, pues consideran que la seguridad de cientos de estudiantes no puede depender de promesas incumplidas ni de medidas temporales
