“Sí hay Miedo, Pero el Miedo no se Combate con mas Miedo”
Por Manuel Domínguez Caldera
El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, comentó que la visita a la entidad del embajador de los Estados Unidos, Ken Salazar, obedece a diversos temas; además dijo que realizaron una visita de cortesía a la Catedral Basílica, por lo que enfatizó que la presencia es positiva y beneficiosa en el estado y para la ciudadanía, sobre todo por el interés para colaborar entre ambas naciones.
“Veo positiva, puede dar muchos frutos y es necesario darle seguimiento, me gustó mucho la expresión que usó, que Estados Unidos quiere ser socio con México, en la lucha contra la violencia. Está la mesa servida y corresponde a las autoridades que tienen la encomienda principal”.
“Se pretendía quitar esa idea negativa, no se trata de negar la realidad; le dije directamente que veíamos miedo en la gente, pero el miedo no se combate con más miedo. Es lo que significa esa medida, pues decir que no vengan porque es peligroso, no conviene al estado, ni a los familiares de migrantes que viven en el estado. Esperamos que se revise esa postura, respetamos que haya criterios e indicadores”.
Además, sobre la seguridad en la entidad, mencionó que desde la Iglesia han llamado a un diálogo y foros para colaborar en la mejora de la sociedad en la atención a la violencia.
“Nosotros como Iglesia nos corresponde a hacer conciencia e invitar a la gente a la participación y la construcción de la paz. Hemos hecho varias jornadas de oración y estamos preparando los foros de reflexión para construir la paz, necesitamos de manera muy concreta involucrarnos todos; porque es un trabajo de todos”.
“Estamos insistiendo en que la paz no se construye con las armas convencionales, sino desde las conciencias, las familias y las escuelas, desde la misma sociedad. Eso es lo que podemos abonar, los foros tienen la finalidad de hacer conciencia de que la paz es posible y además, es necesaria y se logrará si todo el mundo lo logramos”.
Por último, sobre la reciente peregrinación a Plateros, Fresnillo, con sacerdotes, recalcó Noriega Barceló que han dialogado con los párrocos pues son quienes conocen la realidad de la sociedad.
“Primero porque ellos mismos la viven, tienen que trasladarse de una comunidad a otra, no faltan fiestas patronales, emergencias como la muerte de personas, ellos viven en carne propia pero también escuchan a las personas. Lo que llamamos nosotros el pastoral del consuelo”.
“Esa es nuestra misión, lo que me platican es la realidad de cada día, inseguridad, que hay miedo y que empiezan a ver desconfianza, pues respuestas rápidas no las hay. Desconfianza hacia las autoridades, por la forma y la estrategia de la que tanto hemos hablado, que no es suficiente la contención a través de la presencia del Ejército no es suficiente, porque están unas semanas y luego vuelve la cruda realidad”, finalizó.