Denuncian Represión, Ineptitud y Obras Innecesarias
Por Miguel Alvarado Valle
Durante el tercer informe del gobernador David Monreal Ávila, integrantes del Movimiento Feminista de Zacatecas se manifestaron en las inmediaciones de Palacio de Convenciones, sin poder acercarse al lugar. A pesar de ello, lograron visibilizar su protesta, recordando la represión ocurrida hace seis meses en contra 17 mujeres de la sociedad civil durante la manifestación del 8M.
Este suceso, que se dio en el contexto del Día Internacional de la Mujer el pasado 8 de marzo, donde las mujeres, quienes se encontraban ejerciendo su derecho a la manifestación pacífica, fueron víctimas de violencia extrema: las golpearon, arrastraron, amenazaron, insultaros y encarcelaron lo que provocó repudio nacional en contra de David Monreal, su secretario general de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, el general Arturo Medina Mayoral, secretario de Seguridad Pública, Oswaldo Caldera Murillo, director de la Policía de Vialidad y policías estatales y municipales, quienes fueron demandados penalmente por sus víctimas.
Durante la protesta de hoy, las activistas desplegaron una gran bandera con el símbolo feminista y una pancarta, reiterando que los sucesos del 8M no se olvidan.
Con firmeza, leyeron un posicionamiento reprochando a las autoridades locales, en especial al gobernador Monreal Ávila: “Presentamos este posicionamiento, pudiéramos estar en su lugar leyendo un informe que, seguramente, estaría más nutrido tanto en cantidad como en calidad, que el que hoy está leyendo el gobernador del estado, David Monreal Ávila. Sabemos de antemano que son todo mentiras, porque los hechos son los que realmente hablan”, señalaron.
Las manifestantes reiteraron que desde marzo han mantenido un pliego petitorio que incluye la renuncia e inhabilitación de altos funcionarios estatales, entre ellos Rodrigo Reyes Mugüerza “Gustavito”, secretario de Gobierno; Arturo Medina Mayoral, secretario de Seguridad Pública; y Francisco Oswaldo Caldera Murillo, director de la Policía de Seguridad Vial, señalando a estos funcionarios como responsables de la represión y violencia contra las mujeres durante la manifestación del 8M.
Además, exigieron una investigación exhaustiva y transparente sobre los actos de intimidación hacia las manifestantes, tales como la revisión de pertenencias a usuarias de transporte público y el hurto de teléfonos celulares y dinero, que hasta la fecha no han sido devueltos. Las feministas también denunciaron las amenazas que recibieron trabajadoras del gobierno para que no asistieran a la marcha.
En su posicionamiento, exigieron puntualmente una disculpa pública por parte del gobernador y el compromiso de una reparación integral del daño, así como la garantía de que no se repetirá la represión hacia ningún movimiento social que ejerza su derecho a la manifestación. Por otro lado, un grupo de ciudadanos se manifestó en el bulevar a la entrada de Ciudad Administrativa, oponiéndose al proyecto del viaducto elevado o “segundo piso del bulevar Metropolitano”.
Con pancartas que decían: “No al segundo piso”, los manifestantes dejaron claro su rechazo a esta obra de infraestructura, causando embotellamiento de tráfico con el fin de ser vistos. Argumentaron que la construcción del viaducto elevado no es una prioridad para la población, ya que existen otras necesidades más urgentes en el estado.
Entre las demandas de los ciudadanos se encuentran la rehabilitación de las carreteras, el suministro de agua potable, mayor seguridad pública y apoyo al campo.
Ambas protestas, aunque con demandas diferentes, coincidieron en señalar un malestar generalizado hacia la “nefasta administración de David Monreal Ávila”.