Ahora son Campesinos los que Ganan las Calles de Zacatecas
Por Nallely de León Montellano
Este martes, un nutrido contingente de trabajadores y trabajadoras del campo en Zacatecas y otros estados, marcharon para exigir el cese de la violencia y las desapariciones de personas en el estado, lo cual azota gravemente a toda la entidad (Foto: Diana Moreno Valtierra)
Este martes, un nutrido contingente de t rabajadores y t rabajadoras del campo en Zacatecas y otros estados, marcharon para exigir el cese de la violencia y las desapariciones de personas en el estado, lo cual azota gravemente a toda la entidad.
Lo anterior, tras la privación ilegal de la libertad de Noé Martínez Cervantes y José Porfirio Trejo Acosta, productores de frijol quienes afortunadamente fueron localizados con vida la noche del pasado lunes, sin embargo, amigos, familiares y la sociedad en general decidieron no cancelar sus acciones de protesta con la finalidad de hacer visible la problemática de violencia que sigue afectando gravemente al campo zacatecano.
Desde las 10:00 de la mañana de este lunes, el contingente de más de mil personas comenzó a concentrarse a la altura de la unidad deportiva norte de la capital donde también acudieron con maquinaria pesada y vehículos para realizar una caravana a la par de la marcha, por el bulevar y las principales calles del Centro Histórico, hasta llegar a la Plaza de Armas.
Durante su trayecto los manifestantes señalaron sentir miedo constante de ser alcanzados por la violencia y en algunos casos reconocieron que han omitido levantar la voz por miedo a represalias, resaltaron que la situación ha generado hartazgo entre los productores del campo quienes han dejado de trabajar tranquilamente por temor a ser víctimas de algún incidente delictivo.
Mediante sus consignas, señalaron que, “sin agricultores no hay comida, nosotros sembramos la tierra, ustedes siembren paz, basta de violencia”, mientras cargaban lonas y pancartas para reforzar sus exigencias entre las cuales destacaba el diálogo directo con el gobernador David Monreal Ávila.
Una vez en Plaza de Armas los manifestantes emitieron un pronunciamiento en el cual resaltaron que su manifestación es producto de la impotencia que ha generado la inseguridad en el estado. Resaltaron que a través de su trabajo generan empleos e ingresos para miles de familias zacatecanas y familias de jornaleros foráneos que año con año vienen a Zacatecas en busca de sustento para sus familias.
“Desde aquí le pedimos a la presidenta Claudia Sheinbaum y al gobernador David Monreal Ávila que atiendan nuestro llamado, ya que hoy acudimos a esta marcha para que hagan realidad la paz que añoramos y que nos devuelvan la tranquilidad y la armonía de vivir sin miedo”.
Entre aplausos celebraron la localización con vida de Noé y Pilo, “sin embargo, “es una buena oportunidad porque hay muchas familias que no han mitigado su dolor, esta es una buena oportunidad para el gobierno estatal y federal; revisen con mayor interés y mayor dedicación el tema de inseguridad que permea en nuestras comunidades”.
En el contingente se pudo observar la presencia de jóvenes, niñas, niños, adultos mayores, y visitantes de Jalisco y Nayarit quienes se solidarizaron con la situación que aqueja a campesinos de Zacatecas, ya que, lamentaron, trabajar en el campo se ha convertido en una labor de riesgo.
Mientras se concentraban en la Plaza de Armas, fueron llegando algunos tractores que portaban lonas con la leyenda de exigencia del cese de la violencia, estos mismos tractores fueron estacionados en las inmediaciones de la Plaza de Armas, donde el las y los manifestantes decidieron quedarse sin importar el tiempo de espera, para ser atendidos por las autoridades estatales.
La caravana vehicular abarcó la avenida Hidalgo a la altura del Portal de Rosales donde permanecieron estacionados como símbolo de protesta y exigencia de una mesa de diálogo con David Monreal Ávila para externar su preocupación ante las distintas violencias vividas como cobro de piso, violencia psicológica entre otras que les ha ocasionado pánico y psicosis colectiva.